Las tres generaciones Barber

Los tres protagonistas son personajes que deben superar grandes obstáculos y frustraciones a lo largo de sus vidas, siendo la muerte de familiares o personas unidas a ellos algo muy importante, el desconocimiento completo de su identidad está siempre presente en sus vidas, siendo un interrogante esencial para el desarrollo de la novela.

Las relaciones con las mujeres siempre terminan en fracaso, ya sea un familiar o pareja: Effing se casa con Elizabeth, una mujer a la cual nunca amó y abandona al irse al desierto de Utah. Elizabeth enloquece y muere durante la niñez de Solomon, fruto de la última noche con Effing, dejándolo huérfano. Solomon, profesor de Historia en una universidad, se acuesta con Emily Fogg, una alumna, arruinando su reputación. Emily da a luz a Marco, sin reconocer a Solomon como padre del niño y sin hacerle saber que tenía un hijo. Muere 11 años después, dejando a Marco a cargo de su hermano Víctor. Marco, ya de adulto, conoce a Kitty Wu, de la cual se enamora para luego separarse debido a un embarazo que ella quiso abortar.

Los tres Barber fueron grandes lectores, apasionados por la literatura y el arte, encontrando en la literatura un escape de su realidad. Julian Barber era pintor, y escapa de su familia, especialmente de su esposa, en el viaje a Utah para pintar paisajes, viaje que termina con él estando solo en la cueva, luego de la muerte del hijo de su amigo. En esa cueva Julian se dedica a pintar y escribir, ocupando todo su tiempo en eso. Luego, al envejecer, siendo Effing, es un gran lector. Solomon es profesor de Historia, escribe libros sobre ello y también un libro llamado “La Sangre de Keppler”, que trata sobre la vida de su padre y cómo muere, siendo esta la manera de Solomon de aceptar la ausencia de un padre en su vida. Por último, Marco, luego de la muerte de tío Víctor y habiendo heredado todos sus libros, los lee, siendo esta la manera de velarlo, de sentirlo más cerca.

Ninguno de los tres Barber sabe manejar sus problemas, los tres tratan de superarlos por sí mismos, sin hacer nada al respecto, dejando al azar sus vidas. No aceptan sus problemas, se encierran en sí mismos y tratan de disimular su infelicidad de distintos modos, ya sea siendo agresivo y soberbio, tratando de desviar la atención de la gente hacia otro lado, inventando mentiras disparatadas y casi sin sentido para no decir verdaderamente qué es lo que sucede.